domingo, 3 de junio de 2012

El saco de plumas

Un hombre que calumnió grandemente a un amigo, todo por la envidia que le tuvo al ver el éxito que este había alcanzado.
Tiempo después se arrepintió de la ruina que trajo con sus calumnias a ese amigo, y visitó a un hombre muy sabio  a quien le dijo:
"Quiero arreglar todo el mal que hice a mi amigo. ¿Cómo puedo hacerlo?",
a lo que el hombre respondió: "Toma un saco lleno de plumas ligeras y pequeñas, suelta una donde vayas".
El hombre muy contento por aquello tan sencillo que el sabio le dijoque hiciese salió feliz y tomó el saco lleno de plumas.
Al cabo de un día las había soltado todas.
Volvió donde el sabio y le dijo: "Ya he terminado",
a lo que el sabio contestó: "Esa es la parte más fácil, ahora debes volver a llenar el saco con las mismas plumas que has soltado.
"Sal a la calle y búscalas".
El hombre se sintió muy triste, pues sabía lo que eso significaba y no pudo juntar casi ninguna.
Al volver, el hombre sabio le dijo:
"Así como no has podido juntar de nuevo las plumas que volaron con el viento, así mismo es el mal que hiciste, voló de boca en boca y el daño ya está hecho. Lo único que puedes hacer es pedirle perdón a tu amigo, pues no hay forma de revertir lo que hiciste".

Reflexión:
"Cometer errores es de humanos y de sabios pedir perdón".